Kingdom Come Deliverance II: Crónica de un exitazo anunciado que ni el más optimista esperaba
Dos millones de «Henry» cabalgan por Bohemia y Warhorse ya afila los cuchillos con tres DLCs y un crossover… ¿con zombis?
¡Que alguien me traiga hidromiel, y de la buena! Lo que ha pasado con Kingdom Come: Deliverance II es de esas noticias que te reconcilian con la industria. En un mundo saturado de pases de batalla, juegos como servicio y prisas, llega un estudio checo, se toma su tiempo y nos planta en la cara una secuela que no solo cumple, sino que revienta las expectativas. Porque, vamos a ver, ¿dos millones de copias vendidas en apenas dos semanas? Para que nos hagamos una idea, a su aclamado predecesor le costó todo un año alcanzar esa misma cifra. Es una auténtica barbaridad que demuestra una cosa: había muchísimas ganas de volver a la Bohemia del siglo XV.Y yo, que queréis que os diga, lo entiendo perfectamente. El primer Kingdom Come fue esa joya en bruto, ese diamante sin pulir que, pese a sus bugs y sus asperezas, te ofrecía algo que casi nadie se atrevía a dar: una inmersión histórica y un realismo sin concesiones. Warhorse Studios ha cogido esa base, ha escuchado a la comunidad y, por lo que parece, ha lanzado un producto mucho más refinado desde el día uno. El resultado es que la gente se ha lanzado en masa a las tiendas digitales, colocando a KCD2 como el juego más vendido en Steam a nivel global en su lanzamiento y recuperando la inversión del desarrollo desde el primer día. ¡Chúpate esa, mercado de los shooters clónicos!
La hoja de ruta de la victoria: 3 expansiones para no quitarnos la armadura
Como si vender dos kilos de copias no fuera suficiente para descorchar el champán, la gente de Warhorse ya ha puesto las cartas sobre la mesa, y vaya si tienen buena mano. Se han confirmado tres expansiones de pago que llegarán a lo largo de este año, además de una actualización gratuita en primavera con añadidos tan jugosos como un modo Hardcore, carreras de caballos y… ¡un barbero!. Se acabó eso de llevar a Henry con el mismo peinado de paleto de Skalitz durante 100 horas.Los DLCs de pago, por su parte, suenan de maravilla y demuestran que el plan es seguir expandiendo este universo de forma narrativa. El primero, ‘La muerte hecha un pincel’ (‘Brushes with Death’), llegará en verano y nos meterá en una trama con un misterioso artista. El segundo, ‘Legado de la forja’ (‘Legacy of the Forge’), tirará de nostalgia y nos permitirá restaurar la forja de nuestra familia en Kutná Hora, profundizando en las mecánicas de herrería. Y el último, ‘Mysteria Ecclesiae’, nos infiltrará en un monasterio para investigar una epidemia, con un rollo muy a lo «El nombre de la rosa». Esto, señoras y señores, es saber cuidar tu producto y a tu comunidad.
Y de postre, un crossover que nadie vio venir
Aquí es donde arqueo una ceja, me rasco la barba y suelto una risita. En la jugada más aleatoria de la temporada, se ha anunciado un pack de armas de Kingdom Come: Deliverance II para… Dead Island 2. Sí, has leído bien. Podrás reventar cabezas de zombis en Los Ángeles con la emblemática espada de Sir Radzig o la maza del legendario guerrero Jan Zizka.¿Tiene sentido? Absolutamente ninguno. ¿Es genial? Por supuesto que sí. Es una de esas colaboraciones tan bizarras que acaban siendo maravillosas. Supongo que alguien en Deep Silver, que publica ambos juegos, se levantó una mañana con ganas de ver el mundo arder y dijo: «¿Y si juntamos la Bohemia medieval con el apocalipsis zombi?». Pues ole por él. Al final, no deja de ser un guiño simpático que le da aún más visibilidad a la saga.
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Análisis de un éxito: Lo Bueno y Lo Malo
Lo Bueno
- Un triunfo para los RPG «puros»: El éxito masivo de KCD2 es un espaldarazo para las experiencias single-player, narrativas y profundas. Demuestra que hay un público enorme deseando juegos que no le traten como a un niño y le ofrezcan un reto y una historia con sustancia.
- Fidelidad a una visión: Warhorse no se ha vendido a las modas. Han cogido su fórmula de realismo e historicidad, la han mejorado donde hacía falta (¡ese combate más fluido!) y han vuelto a triunfar. Esto es una lección para muchos estudios.
- Comunicación clara con el futuro: Anunciar una hoja de ruta tan completa y apetecible tan pronto es una declaración de intenciones. Saben que tienen un juegazo entre manos y quieren que los jugadores se queden en Bohemia durante mucho, mucho tiempo.
- El poder de la comunidad: Las ventas demuestran que la gente que amó el primer juego ha actuado como embajadora, contagiando el entusiasmo y creando un lanzamiento espectacular.
Lo Malo
- ¿Demasiado pronto para hablar de DLCs de pago?: Aunque es genial saber qué está por venir, hay una parte de la comunidad que siempre ve con recelo el anuncio de expansiones de pago tan pegadas al lanzamiento. Es un debate recurrente, pero que está ahí.
- El riesgo de la autocomplacencia: El éxito es merecido, pero el primer juego nos enseñó que los problemas técnicos pueden ser una losa. Esperemos que Warhorse no baje la guardia y siga puliendo la experiencia post-lanzamiento como se merece.
- El crossover con Dead Island 2: A ver, que a mí me hace gracia, pero no puedo evitar pensar que es una distracción un poco absurda. Es una anécdota divertida, pero que puede descolocar al fan más purista que solo quiere inmersión medieval. Un mal menor, desde luego.