A ver, que levante la mano quien, allá por el año 2000, pensó que tendríamos que esperar más de un cuarto de siglo para ver una nueva entrega canónica de Fatal Fury. Nadie, ¿verdad? Pues aquí estamos, en 2025, y SNK ha decidido que ya era hora de sacudir el tatami. Fatal Fury: City of the Wolves no es solo un nuevo juego de lucha; es una declaración de intenciones, un golpe sobre la mesa para decir: «Oye, que los viejos rockeros nunca mueren». Y, sinceramente, ¡qué manera de volver!Después de 26 largos años desde que Garou: Mark of the Wolves (1999) dejara el listón por las nubes, la expectación era máxima, pero el escepticismo también. ¿Podría SNK capturar esa magia noventera sin sentirse anticuado? La respuesta corta es un rotundo sí. La respuesta larga… bueno, para eso estamos aquí.
De vuelta a South Town: Nostalgia y Novedad a partes iguales
Lo primero que te golpea al arrancar City of the Wolves es su estética. SNK ha optado por un estilo visual que, aunque utiliza motores 3D modernos como el Unreal Engine 4, mantiene esa esencia 2D tan característica de la saga. Es como si hubieran cogido los sprites de Neo Geo y les hubieran inyectado una dosis de esteroides gráficos del siglo XXI. El resultado es espectacular, con personajes que se mueven con una fluidez pasmosa y escenarios llenos de vida que gritan «South Town» por los cuatro costados.La trama, para los que seguimos la historia del «Lobo Solitario», continúa directamente los eventos de Garou. Rock Howard, el hijo del infame Geese Howard y pupilo de Terry Bogard, sigue siendo el eje central, buscando respuestas sobre su pasado. Pero que nadie se preocupe, los veteranos están de vuelta. Terry Bogard, Mai Shiranui, y un buen puñado de caras conocidas regresan, algunos más entrados en años, pero todos listos para repartir estopa.
El guiño definitivo: La gorra del Lobo
Y hablando de Terry, SNK nos ha dado a los fans de toda la vida un caramelo envenenado de nostalgia pura. Con la pre-reserva o como futuro DLC de pago, se incluye el traje clásico de Terry Bogard de Fatal Fury 2. Sí, habéis leído bien. La chupa roja sin mangas, los vaqueros y la mítica gorra roja y blanca. Ponerle este traje a Terry y lanzar un «¡Power Wave!» es un viaje en el tiempo instantáneo. Un detalle que podría parecer menor, pero que demuestra el cariño y el respeto de SNK por su propio legado.

Jugabilidad: Si no está roto, ¡poténcialo!
En lo jugable, SNK ha sido inteligente. No ha reinventado la rueda, sino que ha cogido la base sólida de Garou y la ha pulido con nuevas mecánicas. La más importante es el Sistema REV, que añade una capa extra de estrategia al combate. Con la barra REV, podemos ejecutar versiones potenciadas de movimientos especiales (Rev Arts), romper la defensa del rival (Rev Blow) o extender combos de formas creativas (Rev Accel).Además, regresan mecánicas queridas como el «Just Defense», que premia el bloqueo en el momento justo, y el sistema «Selective Potential Gear» (S.P.G.), una evolución del T.O.P. System de Garou, que nos permite elegir en qué parte de la barra de vida queremos obtener un plus de daño y acceso a movimientos definitivos. Esto da pie a una toma de decisiones constante: ¿prefieres empezar fuerte o guardarte un as en la manga para una remontada épica?Para los nuevos jugadores, se ha incluido el «Smart Style», un esquema de control simplificado que permite realizar combos y especiales sin necesidad de ser un virtuoso de las medias lunas. Una puerta de entrada que se agradece, aunque los puristas seguiremos, cómo no, con el control «Arcade» de toda la vida.
Un Roster para todos los gustos
El plantel de personajes inicial es generoso, mezclando leyendas como Terry y Mai con los protagonistas de la nueva era como Rock Howard, B. Jenet o Tizoc. La inclusión de nuevos luchadores como Preecha o Vox Reaper aporta frescura y nuevos estilos de lucha. Y, por supuesto, ya se ha confirmado una primera temporada de DLCs que traerá de vuelta a Andy Bogard, Joe Higashi y, atención, ¡invitados de lujo de la saga Street Fighter como Ken y Chun-Li! Una colaboración que hace salivar a cualquier fan del género.
En definitiva, Fatal Fury: City of the Wolves no es solo el juego que los fans de SNK esperábamos; es el juego que nos merecíamos. Un regreso por todo lo alto que respeta el pasado mientras mira con valentía al futuro. Si te gustan los juegos de lucha, es una compra obligada. Y si fuiste de los que quemaron monedas en los salones recreativos con el «Are you okay? Buster Wolf!», prepárate, porque el lobo ha vuelto, y tiene más hambre que nunca.

