Cuando FromSoftware anunció Elden Ring Nightreign en The Game Awards de 2024, la comunidad se dividió entre la curiosidad y el escepticismo. Un roguelite cooperativo en el universo de Elden Ring, con mecánicas de battle royale y un enfoque en partidas rápidas de 45 minutos, parecía alejarse del vasto mundo abierto que convirtió a Elden Ring en un hito de 2022. Tras su lanzamiento el 30 de mayo de 2025, este título ha demostrado ser un experimento audaz, imperfecto pero profundamente adictivo, que reinterpreta el ADN de FromSoftware. En VitalGamer, analizamos por qué Nightreign es tan divisivo y, al mismo tiempo, tan magnético.
⚔️ Un combate frenético que desafía lo conocido
El núcleo de Elden Ring Nightreign es su combate, que toma la base de Elden Ring y la acelera hasta límites insospechados. Las expediciones en Limveld, un mapa inspirado en Limgrave pero con ubicaciones y enemigos aleatorios, exigen decisiones rápidas: ¿atacar a ese jefe de campo para obtener reliquias o correr hacia una iglesia para más frascos? Los ocho Nightfarers, cada uno con habilidades únicas como el gancho de Wylder o los hechizos de Recluse, añaden profundidad táctica. En una partida con amigos, coordinar un asalto al Nightlord Gladius, un lobo tricéfalo que se divide en tres, fue tan caótico como glorioso, con gritos de “¡revive!” resonando en Discord. Sin embargo, la falta de soporte para dúos y un matchmaking inestable, como señalan usuarios en X (@NintenGeeks), limitan la experiencia cooperativa, haciendo que el ideal de tres jugadores sea difícil de alcanzar.
🌌 Limveld: Un mundo comprimido sin tiempo para la calma
Limveld es tanto un homenaje como una ruptura con el diseño de Elden Ring. A diferencia de las Tierras Intermedias, donde la exploración pausada era un placer, aquí el tiempo es el enemigo. Una tormenta azul, reminiscente de Fortnite, encoge el mapa, forzando un ritmo vertiginoso. Los castillos y ruinas, aunque visualmente impresionantes, carecen de la narrativa ambiental que definía a FromSoftware, algo que críticos en Eurogamer han lamentado. Jugar solo, como hice en mis primeras horas, es un desafío brutal: sin compañeros para revivirte, un error contra un jefe como el Nameless King (sí, el de Dark Souls III) puede acabar con 30 minutos de progreso. En foros como ResetEra, los jugadores debaten si este enfoque sacrificó la esencia de la exploración por un formato arcade que no todos abrazan.
🔥 Nightlords: El corazón pulsante de Nightreign
Donde Nightreign brilla es en sus Nightlords, los jefes finales de cada expedición. Enfrentar a Libra, una bestia equilibrada con ataques orbitales, o al colosal Gladius, es un espectáculo visual y mecánico. Cada Nightlord tiene dos fases, y la transición a la segunda, como describe TheGamer, evoca la intensidad de Shadow of the Erdtree. Sin embargo, su elevada salud, diseñada para tres jugadores, puede tornar los combates en guerras de desgaste, especialmente en solitario, donde el equilibrio es deficiente, según IGN. La comunidad en X (@FolagoR) celebra la inclusión de efectos de estado como el veneno, que facilitan estrategias contra estos titanes, pero el grindeo repetitivo para obtener reliquias adecuadas frustra a algunos, recordando las críticas a Destiny 2 en sus inicios.
🎮 Innovación a costa de la tradición
Nightreign es un experimento que no teme arriesgarse, pero sufre por ello. La ausencia de una narrativa cohesionada, relegada a Remembrances que exploran a los Nightfarers, decepciona a quienes buscan el lore profundo de Elden Ring. Técnicamente, el juego recicla activos de su predecesor, lo que algunos en Steam critican como un “asset flip” a 39,99 €. Además, problemas de rendimiento, como stuttering en PC y la falta de crossplay, según GamesRadar, empañan la experiencia. A pesar de ello, la adicción de “una partida más” es innegable. Recuerdo noches jugando Bloodborne, obsesionado con superar a un jefe; Nightreign captura esa urgencia, pero en un formato más social que no todos los fans de Souls abrazarán.
🛡️ ¿Vale la pena aventurarse en Elden Ring Nightreign?
Elden Ring Nightreign no es el sucesor de Elden Ring que muchos esperaban, sino una reinvención valiente que condensa su esencia en un roguelite cooperativo. Es un título que brilla con amigos, pero tropieza en solitario y con problemas técnicos. Su propuesta, única en el catálogo de FromSoftware, atraerá a quienes busquen un desafío frenético, pero alienará a los puristas de la exploración pausada. Con más de 2 millones de jugadores en su primer día, según PC Gamer, su impacto es innegable, aunque su Metacritic de 78 refleja su polarización. ¿Listo para enfrentarte a los Nightlords? Comparte tu experiencia en VitalGamer y únete a la discusión sobre este fascinante experimento.