Nintendo se va de compras a Singapur: ¿El futuro de Splatoon y sus exclusivas?
¡Muy buenas, gente! Aquí vuestro colega de Vitalgamer, listo para darle a la tecla y soltaros la noticia que ha sacudido el avispero. Resulta que Nintendo, esa compañía que se mueve por la industria con la sutileza de un Snorlax en una tienda de porcelana, ha vuelto a hacer una de las suyas. Y no, no es otro rediseño de Joy-Con. Han anunciado la adquisición de Bandai Namco Studios Singapore, el equipo que, entre otras cosas, ha metido mano en la creación de joyas como Splatoon 3.La noticia, confirmada el 27 de noviembre, ha caído como una bomba de tinta en Cromópolis. A partir del 1 de abril de 2026, el estudio pasará a llamarse Nintendo Studios Singapore, integrándose oficialmente en la familia de la Gran N. Un movimiento que, si me preguntáis, tiene más miga de la que parece.
De colaboradores a familia: Una relación que venía de lejos
A ver, que no nos pille por sorpresa. Esto no es un flechazo de una noche. Nintendo y el estudio de Singapur ya tenían un historial de colaboraciones. Su trabajo en la saga Splatoon es la prueba más evidente, donde han aportado su talento en la creación de assets artísticos, desde el arte conceptual hasta el modelado de personajes y entornos. Pero su currículum no se queda ahí; también han participado en el desarrollo de New Pokémon Snap e incluso, según rumores, estuvieron en las fases iniciales del tortuoso desarrollo de Metroid Prime 4 antes de que volviera a manos de Retro Studios.Fundado en 2013, este equipo no solo ha sido un socio clave para Nintendo, sino que también ha dejado su huella en franquicias de la propia Bandai Namco como Tekken, Soul Calibur y Ace Combat. Estamos hablando de un estudio con una fuerte especialización en el apartado artístico y con experiencia en proyectos de gran calibre.
¿Qué significa esto para el futuro? Calamares, exclusivos y la estrategia de Nintendo
Aquí es donde nos ponemos el gorro de analista y empezamos a especular, que es lo que nos gusta. Nintendo ha sido clara: el objetivo es reforzar su estructura de desarrollo interna. En los últimos años, hemos visto a la compañía de Kioto comprar estudios con los que ya tenía una relación estrecha, como Next Level Games (Luigi’s Mansion) o Monolith Soft (Xenoblade). Es una estrategia que grita «si funciona, hazlo tuyo». Y, sinceramente, tiene todo el sentido del mundo.
- ***Splatoon* a toda máquina:** Con los creadores de parte de su ADN ahora en casa, es de esperar que el desarrollo de futuras entregas de Splatoon (¿alguien dijo Splatoon 4 o ese misterioso Splatoon: Raiders?) sea todavía más ágil y ambicioso. Tener un equipo dedicado exclusivamente al universo de los Inklings y Octolings podría significar más contenido, más rápido y, quién sabe, spin-offs que exploren nuevas facetas de este mundo tan colorido.
- **Nuevas IPs y apoyo a otras sagas:** Aunque su especialidad es el arte, no hay que subestimar el potencial del estudio. Integrarse en Nintendo podría darles la oportunidad de liderar proyectos propios o de servir como un equipo de apoyo vital para sagas que necesitan un empujón. ¿Os imagináis un nuevo F-Zero o Star Fox con el músculo artístico de este equipo? Soñar es gratis, amigos.
- **Expansión en el Sudeste Asiático:** Este movimiento también es una declaración de intenciones a nivel geográfico. Nintendo busca acelerar su negocio en el Sudeste Asiático, un mercado cada vez más importante. Tener un estudio propio en Singapur es un paso lógico para consolidar su presencia en la región.
Seamos sinceros, en una era donde las mega-adquisiciones de Microsoft y Sony acaparan titulares, la estrategia de Nintendo es mucho más quirúrgica. No compran por comprar; compran talento que ya conocen, que ha demostrado su valía y que encaja en su filosofía. Es una jugada inteligente, menos ruidosa, pero igual de efectiva.

